La Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) criticó que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) haya declarado a Televisa por segunda ocasión sin poder sustancial en el mercado de televisión de paga, a pesar de ser un servicio evidentemente concentrado
. Acusó que el órgano regulador no impondrá ninguna medida regulatoria, sin importar que al tercer trimestre de 2015 la televisora aglutine en sus seis empresas 60.9 por ciento de los suscriptores. Sostuvo que el instituto no hizo una investigación a fondo.
El Ifetel ha ignorado que las redes de televisión por cable son locales o regionales; en cambio, les otorga un tratamiento nacional, cuando estas redes no poseen esa característica. El Ifetel pudo determinar el poder sustancial en los mercados por ciudades o regiones, donde las empresas cableras de Televisa tienen una cuota de mercado relevante o donde los competidores encuentran barreras de entrada o falta de incentivos para competir con esa empresa
.
La semanada pasada el Ifetel dio a conocer la segunda resolución sobre la investigación que realizó sobre la posible existencia de poder sustancial en el mercado de televisión de paga, donde al igual que en la resolución de septiembre de 2015 señaló que no existen elementos suficientes
para determinar que Televisa tiene poder sustancial en ese mercado, a pesar de haber adquirido las cableras Cablecom, motivo de la primera investigación, y Telecable, razón de la segunda.
La televisora además es dueña de la empresa de televisión satelital Sky, y de las cableras Izzi, Cablemás y TVI.
La Amedi explicó que el artículo noveno transitorio de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión de 2014 permite a Televisa consolidar empresas en tanto exista un agente económico preponderante en telecomunicaciones (América Móvil). Dicho transitorio impide al Ifetel aprobar o rechazar esas adquisiciones de empresas. Sin embargo, la autoridad sí tiene la obligación de investigar las concentraciones y, en su caso, imponer medidas de encontrar poder sustancial de mercado
.
La Amedi señaló que una de las principales barreras de entrada se ubica en la producción o compra de contenidos, cuyos costos se elevan para los competidores de Televisa dada su menor capacidad financiera, menor eficiencia económica, menor número de suscripciones y su restringido poder de negociación con los productores de contenido y de señales de televisión, ante un operador con 60 por ciento de participación en el mercado.
Puntualizó que Televisa es el principal productor de contenidos en español a nivel mundial y que en 2013 fue declarado agente económico preponderante en radiodifusión, por lo que consideró que esta declaratoria debiera ratificar su poder sustancial de mercado en un segmento que se caracteriza por la distribución de contenidos, canales y señales de televisión
.