A una semana de que comience a emitir su nueva programación, “la cadena libre” de México, la primera nacida para romper con un fuerte duopolio en la televisión mexicana de más de 20 años, no ofrece nada nuevo, según los analistas. Las expectativas puestas en el tercer canal se han roto para muchos después de conocer su programación, que coincide en formatos y en horarios con la competencia. Los expertos señalan que detrás del proyecto existe la intención de repartirse otro pedazo del pastel de la opinión pública del país.
En uno de los peores momentos del negocio televisivo, donde las ganancias por publicidad no son las de hace décadas y los públicos, cada vez más fragmentados, se reparten entre las diferentes plataformas que ofrecen vídeo bajo demanda, como Netflix, entra un nuevo jugador a competir con los grandes: Televisa y Tv Azteca. Los dos gigantes que se han disputado la parrilla durante 20 años, alimentando un duopolio difícil de penetrar. “Los niveles de audiencia en la televisión abierta van a la baja, por lo que, para ser exitosa, deberá tener contenidos atractivos”, apuntó Francisco Abundis director asociado del centro de encuestas Parametría.
“La pregunta que todos nos hacemos es: ¿Por qué invertir en un negocio que ha crecido muy poco? Se sospecha que detrás hay una intención política”, apunta Leonardo Peralta, periodista especializado en Telecomunicaciones. “En México la televisión sigue siendo una parte fundamental para formar la opinión política de los ciudadanos. Por eso, el rating es lo de menos”, explica Mariana Torres, jefa de contenidos de la página de análisis de medios Media Telecom. Este diario ha intentado sin éxito contactar con el nuevo canal para que le ofreciera su versión. La analista añade que no se apuesta por contenidos novedosos, series rompedoras ni periodistas “que destaquen por su crítica o investigaciones”: “Corre el riesgo de parecerse mucho a la competencia y no favorecer a la pluralidad”, sentencia.La programación de Imagen compite en formatos y horarios con la competencia. Estará enfocada en los contenidos de ficción e informativos, ya que son los más consumidos por los mexicanos. Pero los nuevos fichajes para conducir estos programas son las estrellas de otros medios que ya tienen su propia audiencia. Para ganarse parte del público del informativo nocturno (el más visto de la parrilla), Ciro Gómez Leyva deberá luchar contra el recién estrenado programa de Denisse Maerker de Televisa y el de Javier Alatorre de Tv Azteca.
Imagen Televisión nace después de una concesión del espectro radioeléctrico al Grupo Imagen en 2015. El conglomerado de medios cuenta con el periódicoExcélsior, su canal de televisión (para la zona metropolitana de la capital) y Radio Imagen. Su propietario es Olegario Vázquez Aldir, uno de los empresarios más poderosos de México, hijo mayor del magnate gallego Olegario Vázquez Raña, quien fundó su imperio sobre los hospitales Ángeles, la cadena de hoteles Camino Real, el grupo financiero Multiva y la constructora Prodemex. Para el nuevo proyecto han anunciado una inversión de 10.000 millones de pesos.
La necesidad de renovar las historias en televisión ha llevado a Televisa y Tv Azteca a probar temáticas más provocadoras, como late night shows al estilo estadounidense o las narconovelas, vetadas hasta ahora en los canales abiertos. Además, Televisa creó su propia plataforma de vídeo bajo demanda: Blim.
La propuesta más interesante de Imagen es la alianza con la productora Argos, propiedad del veterano periodista de guerra Epigmenio Ibarra, con series de un perfil más crítico y social, que huyen de los clichés de las clásicas telenovelas. “Cuando la productora trabajó para Tv Azteca prometió mucho en sus inicios pero después volvió a estancarse como Televisa. Hay muchas expectativas y pocas probabilidades de que sea una televisión distinta”, sentencia Torres.